Brasil bloquea el acceso a Telegram en todo el país
Un juez del Supremo Tribunal Federal (STF) prohibió el servicio de chat por “no combatir la desinformación”. Es como WhatsApp, pero también tiene canales públicos.
Un juez del Supremo Tribunal Federal (STF) ordenó este viernes el bloqueo de la plataforma de mensajería Telegram en Brasil por «no colaborar con las autoridades y no combatir la desinformación», según una decisión publicada en el sitio oficial de la institución.
El juez Alexandre de Moraes afirmó que la plataforma «dejó de atender órdenes judiciales» en varias ocasiones y determinó «la suspensión completa e integral del funcionamiento de Telegram en Brasil». La popular plataforma está instalada en el 53% de los celulares del país, según el Tribunal Superior Electoral.
Telegram es un servicio de chat como WhatsApp, con la diferencia que también permite acceder a canales informativos que son públicos.
La orden, dictada en forma cautelar, es una respuesta de la Justicia al incumplimiento por parte de los responsables de Telegram de numerosas citaciones en procesos que investigan la difusión en masa de noticias falsas en Brasil, que están precisamente a cargo del juez De Moraes.
En los últimos meses, Telegram ha pasado a ser el principal medio de mensajería utilizado por el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, y los grupos de ultraderecha que le apoyan, que comenzaron a migrar hacia ese servicio después de que muchos de sus contenidos fueron bloqueados en otras plataformas por mentirosos u ofensivos.
Por qué Brasil bloquea Telegram
«La aplicación Telegram es notoriamente conocida por su postura de no cooperar con autoridades judiciales y policiales de diversos países» y llega a usar esa «actitud» como «ventaja en relación a otros sistemas de comunicación«, indicó De Moraes en el documento en que justificó la medida cautelar.
El magistrado añadió que, por esa negativa a colaborar con las autoridades judiciales, Telegram opera «en un terreno libre para la proliferación de diversos contenidos, incluso con repercusiones en el área criminal».
De Moraes también subrayó que la Justicia, a través de la Policía Federal, intentó «numerosas veces» establecer contacto con los representantes de Telegram en el país, pero jamás tuvo respuesta.
«La plataforma Telegram, en todas esas oportunidades, dejó de atender al comando judicial, en un total desprecio a la Justicia brasileña«, agregó el magistrado.
En su decisión, que atiende un pedido de la Policía Federal, el juez pidió a la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) que «adopte inmediatamente todas las providencias necesarias para hacer efectiva la medida».
También pidió a las empresas Apple y Google en Brasil y a los proveedores de internet que, en un plazo de cinco días, adopten mecanismos para hacer inviable el uso de la aplicación en el país.
Entre las órdenes incumplidas por Telegram, Moraes cita el pedido de bloqueo de perfiles relacionados al bloguero bolsonarista Allan dos Santos, investigado por difundir desinformación, y también la falta de colaboración en casos de abuso sexual de menores y pornografía infantil.
También recuerda que el Tribunal Supremo Electoral de Brasil intentó convocar, sin éxito, a representantes de Telegram a una reunión para que la compañía colaborara en el combate a la desinformación de cara a las presidenciales de octubre, como se comprometieron las redes Twitter, TikTok, Facebook, WhatsApp, Google, Instagram, YouTube y Kwai.
Bolsonaro está concentrando su militancia en grupos y canales de Telegram, tras ver borradas algunas de sus publicaciones en Youtube, Twitter y Facebook por informaciones falsas.