No es la única opción que analiza el gabinete económico, que esta semana definirá cuál será la medida a tomar.
Lo que sí queda claro es que el programa se replanteará totalmente, de cara a lo que suceda en 2021.
El ministro Martín Guzmán ya planteó en su proyecto de Presupuesto 2021 que para ese momento no se prevé ninguna de las asistencias nacidas en la emergencia de la pandemia, como el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) o el ATP (pago de salarios complementarios, a cargo del Estado).
A esta hora, hay tres opciones que analiza el Gobierno para definir la asistencia.
En la evaluación será clave la posición de los gobernadores, que buscan una extensión de los beneficios ya que en los distritos del interior se percibe una extensión de los contagios, que le pone límites a la apertura de las actividades económicas.
Estas son las alternativas que maneja el Gobierno
Opción 1:
Mantener el beneficio tal cual se conoce.
Es decir, que se asista con $10.000 a 8,9 millones de personas.
El costo fiscal de la decisión asciende a unos $ 90.000 millones en dos meses, que es el período durante el cual se transfiere el dinero.
La asistencia es inmediata ya que la gran mayoría de los beneficiarios ya se encuentra bancarizada.
Opción 2:
El programa desaparece tal como se lo conoce hasta ahora y resulta reemplazado por otros beneficios, de alcance más limitado, y a cambio de una contraprestación laboral.
Aunque no se lleva a cabo ahora, lo más probable es que esta idea quede para el inicio del próximo año, dada la extensión de la pandemia.
Opción 3:
Una de las posibilidades que se evalúan es reconvertir el IFE en un programa para crear hasta 3 millones de empleos.
La idea es que las personas más afectadas por el desempleo reciban un subsidio de $ 17.000, en lugar de los $ 10.000 actuales, a cambio de una contraprestación o capacitación en servicios públicos, emprendimientos productivos, cooperativas y empresas privadas.
Como quedó dicho más arriba, detrás de la definición de esta estrategia existe un debate clave en el seno del Gobierno acerca del margen fiscal para reordenar el gasto social y las áreas que estarán a cargo de manejar fondos que hoy llegan a los $ 90.000 millones bimensuales.
¿De qué depende la continuidad del IFE 4 o si se termina acá?, se le preguntó a un miembro del gabinete económico.
Respuesta: De si pasamos ahora mismo a un programa de capacitación y empleo o se paga la última vez el IFE y luego vamos a ese programa. Lo que todos tenemos claro es que termina sí o sí y que no queremos un nuevo plan social.
«La idea es que no se convierta en un plan social, sino en uno de capacitación y empleo. Todavía no se definió», confirmaron fuentes de la Anses.
Lo más probable es que la decisión se tome en las próximas horas cuando, terminado el feriado, se concrete la nueva reunión de gabinete económico y se repase la situación pandémica en las provincias, y el ministro Martín Guzmán detalle la evolución de las cuentas fiscales. /iProfesional
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...
Relacionado