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La campaña se mezcla con los efectos de la pandemia y la debacle económica

Después de no poder encontrarse con la Selección Nacional ganadora de la Copa América, Alberto Fernández inició la semana que pasó en clave electoral. Hizo anuncios sobre el programa emblema de Cristina Kirchner, el Conectar-Igualdad. La intensificación de la campaña lo llevó a mostrarse en diversas actividades con espadachines del camporismo y evitar la imagen de enfrentamiento con Máximo y Cristina Kirchner.

En su despacho de Balcarce 50, el mandatario hizo una última oferta a Matías Lammens, titular del ministerio de Turismo y Deportes, para que encabece la lista de diputados porteños. Si no acepta, en su lugar iría el radical kirchnerista, Leandro Santoro, pese a las resistencias del PJ porteño y no pocos dirigentes del propio Frente de Todos.

Mientras se discutían los nombres que completarán las boletas en las PASO y Legislativas, en una entrevista radial, Fernández dijo no conocer la dimensión de lo que ocurre en Cuba y se ganó las tapas de casi todos los diarios. El ala oficialista que respalda la actualidad de lo que pasa en la isla, celebró el esquive presidencial, no así quienes intentan organizar la campaña y entienden que ese discurso no le cae simpático al votante medio, el que ve una amenaza en el peronismo “progresista”.

Los ejes electorales para tratar de perder la menor cantidad de votos posibles giran en torno a defender la gestión (en particular de la pandemia) y en cuestionar el endeudamiento que dejó Mauricio Macri. En esa línea continuaron los actos en los pagos bonaerenses con una actividad en el territorio que gobierna Martín Insaurralde, Lomas de Zamora. El Presidente se mostró nuevamente con el núcleo cristinista: Axel Kicillof, Luana Volnovich (PAMI), y la directora de la ANSES, Fernanda Raverta. Juntos anunciaron el pago de un bono de 5 mil pesos para jubilados y un programa que permitirá a las madres en edad de ingresar al sistema de reparto, sumar aportes anuales por hijo. Medidas que no resuelven la caída del poder adquisitivo de los adultos mayores pero le sirven a la oposición para sumar puntos a su campaña.

Entre las reuniones más importantes que se sucedieron en Casa Rosada, estuvo la que transcurrió entre el jefe de Estado y representantes de la AMIA. Una vez más los referentes de la entidad judía le pidieron al Gobierno que sea “proactivo” con respecto a las alertas rojas que pesan sobre los acusados por el atentado que tuvo lugar en Buenos Aires en 1994, del que este viernes se cumplieron 27 años.

La cifra de 100 mil fallecidos víctimas del Covid-19 se impuso en miércoles y el Poder Ejecutivo decretó cinco días de duelo nacional. Por su parte, Fernández apuntó a la oposición en un acto en la planta de AySA de Presidente Perón. Allí manifestó que no tiene sentido lucrar con la muerte y hacer “el negocio de dividirnos”.

Sobre el fin de una semana intensa, el INDEC dio a conocer una inflación del 3,2 por ciento en el pasado mes de junio y un acumulado semestral de 25,3%. Pese a ser un número elevado, el dato fue recibido en la Rosada con optimismo, la cúpula económica entiende que se trata del comienzo de una baja, algo que no tiene correlato con las remarcaciones permanentes en los comercios, y de las que los funcionarios parecen estar muy alejados.

En la lógica de dar buenas noticias hubo una teleconferencia entre el Presidente y el propietario de los laboratorios Richmond, Marcelo Figueiras, quien informó que el Instituto Gamaleya aprobó el primer lote de vacunas Sputnik V de fabricación local, y que se produjeron 1,3 millones de dosis del componente uno y 1,1 M, del esperado componente dos.

La presencia que dio una señal importante sobre lo que se discute en las oficinas del palacio gubernamental, fue la del ex secretario de medios de CFK, Pepe Albistur, quien consultado sobre qué nombre podría llegar a ser cabeza de lista en la Provincia de Buenos Aires, dijo sonriente: “tiene perfume de mujer”. En el aire quedó flotando la posibilidad de que se estuviera refiriendo a Victoria Tolosa Paz, presidenta del Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales y esposa del ex funcionario, hoy amigo personal del titular del Ejecutivo.

Los próximos cinco días serán definitorios, ya que el 24 de julio vence el plazo para presentar candidatos. El martes que viene el Presidente podría visitar el bastión de Jorge Milton Capitanich, la provincia del Chaco. Si no se vuelve a suspender, se sumaría a la agenda Santa Cruz, donde tal vez se vuelva a ver en un escenario a la fórmula que ganó la elección en primera vuelta en octubre de 2019, una fecha que parece lejana por los efectos pandémicos y la debacle económica, que es el desafío que las huestes frentistas prometen mejorar en los dos años que les queda en la administración del Estado.

Juan Pablo Peralta, periodistas acreditado permanente en Casa Rosada y el Parlamento nacional argentino para FM Concierto 105.5

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