“No hay hombres imprescindibles, hay actitudes imprescindibles”, el discurso completo de la emotiva renuncia de Esteban Bullrich al Senado
Entre lágrimas, el ex ministro de Educación explicó por qué deja su banca. El Frente de Todos intentó convencerlo de que continúe, pero él ratificó su decisión.
Entre lágrimas y en un clima de profunda emoción en la Cámara Alta, Esteban Bullrich presentó formalmente este jueves su renuncia como senador.
«Renuncio a mi banca con profunda tristeza», dijo Bullrich, ayudado por un dispositivo a través del que reprodujo su discurso y que utiliza para hablar en público tras ser diagnosticado con Esclerosis Lateral Amiotrófica ELA. A su lado varios senadores se mostraron conmovidos.
«Aunque no me corresponde hacerlo, me gustaría que se recuerde de mi paso por esta Cámara por la búsqueda de consensos a través del diálogo«, dijo Bullrich, quien estuvo acompañado por su esposa y en varios tramos recibió abrazos del senador Martín Lousteau. Sus hijos siguieron el discurso desde un palco.
En el inicio de su presentación, Bullrich dejó en claro que tomó la decisión de renunciar a pesar de sus deseos. «Hoy en este recinto del que me honra ser parte vengo a hacer algo que va en contra de cada fibra de mi cuerpo. Nada de lo que soy me indica que este es el camino que quiero seguir. Pero creo firmemente en la idea de que el interés público siempre debe estar por encima de los intereses personales», explicó.
Y amplió: «La realidad me impone esta decisión y la ELA me ha enseñado fundamentalmente a aceptar la realidad. Me siento en este recinto con una profunda humildad y a la vez un enorme orgullo. Con todo el dolor del mundo y la frustración de no tener alternativa quiero anunciar mi renuncia al cargo de senador por la Provincia de Buenos Aires».
Luego pidió cerrar la grieta política. «El diálogo, la búsqueda de razón entre dos, debe ser un acto de generosidad, de amor y de caridad cristiana, entendiendo que la verdad y la justicia son valores que encontrar y no propiedad de alguna de las dos partes. Esa falta de diálogo trasciende estas paredes, vivimos en un país enfocado en la grieta y en el debate violento. Un país en el que la gente escapa de la política, la desprecia y la condena. Un país en el que la gente se recluye en los privado, soltando el sueño de ser parte de la construcción de una Argentina mejor», resaltó.
Bullrich hizo un duro análisis de la actualidad argentina y realizó una autocrítica dirigida a Juntos por el Cambio, su espacio político.
«Nuestro país clama por consensos, los números de pobreza, la falta de desarrollo, los jóvenes que se van del país, la catástrofe educativa y la continua y prolongada postergación de nuestros sueños, producida por un estancamiento del que somos culpables los políticos y no los argentinos, nos obligan a gobernar diferente. Todos hemos sido culpables de gobernar con tapones en los oídos. Todos, nosotros también«, señaló.
En la misma línea, volvió a reclamar cambios en la práctica política. «Si nos quedamos en el egoísmo, la chiquita, lo táctico y la especulación vamos a errar el camino. (Albert) Einstein decía que si querías resultados distintos no hicieras siempre lo mismo. Ya probamos con la grieta y acá estamos».
Por último dejó un mensaje para el resto de los senadores: «Hoy doy este paso con tristeza, pero también sabiendo que si no dejan de hablarse y tender puentes; si son honestos con los demás, pero especialmente, con ustedes mismos, van a encontrar el camino del que nos alejó en este tiempo la ceguera y el egoísmo. Será a partir de ahora sin mí, pero sepan que aunque no esté, estaré. Que la protección de Dios, fuente de toda razón y justicia, los ilumine a ustedes y a todos los hombres del mundo que quieran habitar el suelo argentino».
Tras sus palabras, el ex ministro de Educación fue ovacionado por todos los senadores y por la presidenta de la Cámara, Cristina Kirchner, quien siguió atentamente sus palabras.
El senador del Frente de Todos José Mayans pidió que Bullrich continúe en la Cámara Alta y esa idea fue acompañada por Cristina Kirchner.
De todas maneras, Luis Naidenoff pidió «no apurar ninguna decisión» y que Bullrich tome «unos días» para resolver y allí eventualmente se trate la adaptación al reglamento para que se sume a las sesiones desde su casa.
Luego Bullrich volvió a hablar y ratificó su decisión de renunciar a su banca.
«Agradezco esto pero lo he meditado mucho, es una decisión que tomé con mi familia y es la mejor», dijo Bullrich.
Y agregó: «Gracias de nuevo y tomen mi compromiso de trabajar desde otro lado pero con la misma voluntad. No hay hombres imprescindibles, hay actitudes imprescindibles«. /Clarín
LM