El crimen de Villa Alem: sospechosos se acusan entre sí
“No lo maté. Hablé con él, le entregué el dinero y me dio una bolsa con flores de marihuana. Después me retiré del lugar y se quedó (Gerardo) Agüero hablando con él. Parece que como no tenía plata para comprar, comenzaron a discutir y ahí lo apuñaló”, declaró Hernán “Tony” Tejeda, el otro acusado del crimen de Lucas Liberatore.
El fiscal Ignacio López Bustos ya tiene una teoría del caso. Los acusados se contactaron con la víctima para comprarle 10 gramos de flores de marihuana y lo convocaron el sábado a la noche en la plaza de Larrea al 500, en Villa Alem.
Cuando llegaron a la plaza comenzaron a discutir, al parecer, por el precio del producto y, según relató Agüero, su compañero, “Tony” Tejada, sacó un cuchillo del pantalón y le asestó una puñalada en el pecho a Liberatore, provocándole así la herida que le causaría la muerte minutos después en el hospital Padilla.
El otro imputado contó otra versión completamente diferente. “Cuando estaba en la moto vi cómo lo lastimaba. Me asusté mucho y me largué a llorar. No sabía que estaba muerto. Cuando me enteré, me presenté en la Policía acompañado por mi padre, no por un abogado, como lo hizo Agüero”, relató.
López Bustos le pidió que le dictaran la prisión preventiva por seis meses al considerar que fue el autor del hecho. Sus defensores, Juan Hermosa y su hijo Luis, rechazaron el planteo y pidieron que se lo dejara en libertad o, en su defecto, que le concedieran el arresto domiciliario por tener un problema de salud. La jueza Isolina Apás de Pérez de Nucci resolvió que fuera encerrado en un calabozo durante dos meses.
“No sé quién fue, pero lo único que puedo decir es que una vida no cuesta 10 gramos de marihuana. Por eso deben pagar por lo que hicieron”, declaró César Liberatore, hermano de la víctima.