El Gobierno argentino justificó su voto en la ONU para que se investiguen posibles crímenes de guerra por parte de Israel en Gaza
El presidente Alberto Fernández recibió en su despacho de Casa Rosada a los máximos de los representantes de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA). Fue para intentar bajar los decibeles con la comunidad judía luego del voto de la Argentina en la Organización de las Naciones Unidas, que fue interpretado por ellos como contrario al Estado de Israel.
Según contó el titular de la entidad, Jorge Knoblovits, al finalizar el encuentro en diálogo con los periodistas acreditados en Balcarce 50, el Primer Mandatario les dijo que «no tiene ningún problema» con ese país, y agregó que «le dijimos que la abstención para la Argentina hubiera sido el escenario más prudente», en el marco del enojo de la comunidad por la decisión argentina de acompañar la propuesta en la ONU para investigar presuntas violaciones a los derechos humanos de Israel en sus ataque a la Franja de Gaza, algo que podría derivar en el reconocimiento de «Crímenes de Guerra».
Fuentes oficiales manifestaron que «se dialogó mucho, siempre apostamos al diálogo, aunque obviamente hubo diferencias».
El dirigente de DAIA expresó que «estar en un espacio con países que no son democráticos y violan sistemáticamente los derechos humanos, sin libertades individuales ni respeto por las minorías. Ver al país votar con ellos nos dolió». Las naciones que acompañaron la iniciativa, fueron China, Rusia, Cuba, Venezuela, Bolivia y México.
De todos modos Knoblovits destacó que «fue una reunión honesta, ágil y transparente» con el titular del Poder Ejecutivo, que estuvo acompañado por el canciller Felipe Solá y el Secretario de Culto, Guillermo Olivieri. «Nosotros escuchamos y ellos escucharon», apuntó.
Por su parte el único el referente judío comentó que de parte del Gobierno nacional «no se legitimó nunca a Hamas como una organización valedera, ni como Estado, y que «es una también debe ser investigada», y a su vez informó que el además Fernández planteó que la votación fue en ese sentido porque busca «atender el informe de (Michelle) Bachelet» y señaló que ellos le contestaron que «no» estaban «de acuerdo con esa adhesión».
«Como argentinos víctimas de dos atentados terroristas tenemos la legitimidad para decir que ese voto debería haber sido en todo caso una abstención», insistió y subrayó que «esperamos que en lo sucesivo podamos hacer una acción conjunta (con el Gobierno) para que esto no tenga impacto en la Argentina, porque ha aumentado el antisemitismo y el antisionismo, que para nosotros es lo mismo, lo vemos en redes sociales y en el aumento de pintadas como las de Bahía Blanca».
Del cónclave que duró una hora y media, además del jefe de Estado y el canciller argentino con el secretario de Culto, estuvieron por parte de DAIA, el vicepresidente primero, David Stalman; el secretario general, Alejandro Zuchowicki; el tesorero, Marcos Cohen, y el responsable del Consejo Federal (DAIA Tucumán), Fabián Neiman.
Juan Pablo Peralta, periodista acreditado permanente en Casa Rosada y en el Parlamento nacional argentino para FM Concierto 105.5