Tucuman Sin Límites

En Tucumán, vecinos indignados hicieron 14 denuncias contra una fiesta clandestina pero la policía nunca fue

El evento se llevó a cabo el viernes por la noche y las imágenes se viralizaron en las redes sociales. También se incumplieron los protocolos sanitarios durante la reapertura de un boliche.

A pesar del marcado aumento de los contagios por coronavirus que se registró en Tucumán en los últimos días, cientos de personas desoyeron las advertencias de las autoridades este fin de semana largo y asistieron a dos eventos en los que incumplieron los protocolos sanitarios establecidos por la pandemia. Las imágenes se viralizaron a través de las redes sociales y generaron indignación entre los vecinos, cuyas denuncias fueron pasados por alto por la Policía.

El periodista de TN José Inesta contó que uno de los encuentros tuvo lugar el viernes por la noche y se trató de la cuarta edición de una fiesta clandestina. La misma fue publicitada a través de Internet durante varias semanas y la entrada tenía un costo de $300.

Al enterarse de la realización del evento, fueron varios los vecinos que alertaron a las autoridades. En total, hicieron 14 denuncias al 911, pero ningún agente policial se trasladó al lugar para desarticularlo.

Por otra parte, en Semana Santa también provocó repudio la reapertura de un boliche en Tucumán donde no se respetaron las restricciones establecidas a raíz de la pandemia.

Las imágenes de los eventos fueron difundidas a través de las redes sociales y dieron cuenta de la violación del distanciamiento social y del uso de tapabocas. Asimismo, se observó a una cantidad de asistentes muy superior a la prevista para los respectivos espacios.

Al ser consultados por TN, las autoridades del Ministerio de Seguridad local dijeron desconocer la realización de los eventos y se refirieron a ambos como “fiestas clandestinas”, por lo que se prevé que se lleve adelante una investigación para identificar a los organizadores.

Preocupa el aumento de infectados por COVID-19 en Tucumán

Al igual que en la mayor parte de la Argentina, las autoridades tucumanas se encuentran en estado de alerta por el reciente incremento de casos de coronavirus en el territorio.

En este contexto, la ocupación de camas en los hospitales trepó al 60% y crece el descontento entre el personal de salud, que manifiesta encontrase exhausto y reclama por el pago de guardias y aumento de salarios. Esto llevó a que muchos residentes se encuentren de paro en señal de protesta, lo que dificulta aún más la atención.

Mientras tanto, la curva de contagios continúa en ascenso y ya son más de 1600 las víctimas fatales por coronavirus. Este domingo, el Ministerio de Salud Pública, a cargo de Rossana Chahla, confirmó 444 nuevos casos en la provincia, que totaliza 85.610 pacientes desde que empezó la pandemia.

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