Hay un faltante de 110 Millones de Dólares de la Ciudad Universitaria, según Florencio Aceñolaza
El ex consejero superior egresado Ricardo Cisneros ilustró, al igual que antes la ex decana de Derecho, Adela Seguí, sobre la conmoción que vivió el Consejo Superior de la UNT del 2014 al 2018 por el escándalo con las obras realizadas con fondos de la minería.
¿Dónde está el dinero?
En el primer caso, se sabe que la UNT es socia en YMAD con Catamarca, debido a que el descubridor del yacimiento Farallón Negro, Abel Peirano, le legó sus derechos a la universidad. La ley 14.771 de 1958 creó YMAD y en su artículo 18 dice que el 40% de las utilidades se deben destinar a la UNT para concluir la Ciudad Universitaria, conforme a los planos aprobados, y que al terminarse esta se debía entregar la mitad de ese 40% a las otras universidades y la otra mitad queda de libre disponibilidad.
La plata comenzó a llegar en 2005, al final del rectorado de Mario Marigliano. Cerisola asumió en 2006 (fue rector hasta 2014) e hizo que se hiciera un plan de obras para la ciudad universitaria del Siglo XXI; que Construcciones Universitarias dependiera del Rectorado y que se aplicara una norma por fuera de la ley nacional de Obras Públicas. El 2 de enero de 2008 firmó un acta convenio en YMAD para dar por finalizada la ciudad universitaria y comenzar a repartir la mitad del 40% de utilidades a las otras universidades.
Por todo ello fue acusado ante la Justicia Federal por Ramón Eudal en 2010, y por eso está siendo enjuiciado con sus tres ex funcionarios.
La Ciudad Universitaria legal es la del cerro
Causas judiciales
Por otra parte, dijo que preguntó en el rectorado de Alicia Bardón (ella fue rectora entre 2014 y 2018) si había causas por el acta, y que le respondieron que no había causas judiciales. Cuando fue a consultar en la justicia federal se enteró de que estaba la denuncia de Eudal de 2010 y otra causa de 2013 con una auditoría de la AGN. Y la UNT no había nombrado querellante. “En la UNT hay abogados para tapar acequias. Pero en cuatro años no habían nombrado un abogado”.
Los planos desaparecidos
Y en ese sentido le dio una significación especial a la desaparición de los planos, tema del cual se habla desde hace dos años, cuando se encontraron 2.400 láminas y planos en cajas de aire acondicionado en Planeamiento de la UNT. Opinó que se podría haber averiguado con el código de barras de las cajas de cartón de los aires acondicionados la fecha desde la que estaban arrumbados ahí esos planos. Agregó que los “planos aprobados” de los que habla la ley debían estar en YMAD y en el Congreso Nacional. Añadió que le informaron que había planos de la CU en la biblioteca del Instituto Tecnológico Massachussets.
La declaración de este testigo, así como las de los ex decanos Pío Jiménez y Adela Seguí, mostró la trama seguida en el Consejo que hizo visibilizar el escándalo y llevó a que la UNT intentara declarar nula el acta para seguir recibiendo el 40% -tema que debe debatirse en el futuro y ya hay acuerdo de YMAD y de Catamarca con la UNT al respecto-. También llevó a que la universidad asumiera otros criterios sobre lo que se debe hacer con las utilidades mineras. En medio de la extensa declaración, el ex consejero pidió disculpas y dijo: “Si Florencio Aceñolaza no nos avivaba, nos seguiríamos mirando el pupo”. /Por Roberto Delgado – La Gaceta