Silvina Batakis dijo que va a seguir el programa económico de Alberto Fernández
Luego de un fin de semana de mucha tensión por la salida repentina de Martín Guzmán del Ministerio de Economía y las negociaciones contrarreloj para nombrar a su reemplazante, Alberto Fernández tomó juramento en el Salón Blanco de Casa Rosada a Silvina Batakis.
Esta vez el jefe de Estado no habló rompiendo los protocolos de juramento -como suele hacer casi siempre para agradecer al funcionario saliente- en este caso de Guzmán, inclusive ni hizo alusión a la gestión, que resaltaba hace días, en diversas entrevistas que concede a medios amigos.
Fernández destacaba el trabajo del ahora ex titular de Hacienda y pedía no culparlo por los altos niveles de inflación. Pero según gargantas profundas, unas discusión que tuvieron el viernes por la noche, que desembocó en la posterior renuncia, cambiaron la mirada del Presidente, que quedó desdibujado como representante del Poder Ejecutivo.
A la asunción de la ex secretaria de Provincias del Ministerio del Interior, asistieron dirigentes políticos de todos los sectores del peronismo. Hubo representación de todos los sectores productivos del Frente de Todos.
En las primeras filas se ubicaron el Jefe de Gabinete, Juan Manzur; el canciller, Santiago Cafiero; y los ministros Daniel Scioli (Producción), Jorge Ferraresi (Hábitat), Matías Lammens (Turismo), Claudio Moroni (Trabajo), Julián Domínguez (Agricultura), Martín Soria (Justicia), Juan Zabaleta (Desarrollo Social), Carla Vizzotti (Salud), Tristán Bauer (Cultura), Alexis Guerrera (Transporte), Aníbal Fernández (Seguridad) y Eduardo “Wado” de Pedro (Interior).
En representación del desvencijado «albertismo» estuvieron presentes: Julio Vitobello (Secretario de la Presidencia), Gabriela Cerruti (Portavoz), Juan Manuel Olmos (Jefe de Asesores) y Vilma Ibarra (Secretaria Legal y Técnica).
También se vio a dos integrantes del equipo económico que el fin de semana estaban en la grilla de posibles salientes. Nos referimos al titular del Banco Central, Miguel Ángel Pesce, y la responsable de la Administración Federal de Ingresos Públicas, Mercedes Marcó del Pont.
Otros invitados fueron: la titular de Aguas y Saneamiento Argentinos, Malena Galmarini; el secretario de Energía, Darío Martínez; el Procurador del Tesoro, Carlos Zannini, y el interventor de la Agencia Federal de Inteligencia, Agustín Rossi. El presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, se ubicó en primera fila, al lado del la familia de la flamante jefa de Hacienda.
Participaron del evento los gobernadores: Axel Kicillof (Buenos Aires), Ricardo Quintela (La Rioja), Gustavo Bordet (Entre Ríos), Omar Gutiérrez (Neuquén), Raúl Jalil (Catamarca) y Gerardo Zamora (Santiago del Estero).
En el primer piso de Balcarce 50 estuvo la cúpula de la Confederación General del Trabajo (CGT), conformada por Héctor Daer (Sanidad), Carlos Acuña (Estacioneros) y Pablo Moyano (Camioneros); y cuatro dirigentes sindicales históricos como Hugo Moyano (también del Sindicato de Choferes de Camiones), Andrés Rodríguez (Unión Personal Civil de la Nación), Rodolfo Daer (Alimentación) y José Luis Lingeri (Obras Sanitarias).
Por las organizaciones sociales que están en pie de guerra con Cristina Kirchner estuvieron: Fernando “Chino” Navarro y el diputado Leonardo Grosso, del Movimiento Evita, Esteban “Gringo” Castro, de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular; y Daniel Menéndez (Barrios de Pie). De La Cámpora, la agrupación que más cuestionó a Martín Guzmán, se presentaron: Luana Volnovich (PAMI), Fernanda Raverta (ANSES) y Horacio Pietragalla (Secretario de Derechos Humanos), y la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza.
Los otros ediles que asistieron fueron, Fernando Espinoza (La Matanza) y Andrés Watson (Florencio Varela). También el ex intendente de ese distrito Julio Pereyra, y el diputado provincial e intendente, con uso de licencia, de Almirante Brown, Mariano Cascallares.
La representación del sector empresario fue más reducida. Estuvo representado por el titular de la Unión Industrial Argentina, Daniel Funes de Rioja, Eduardo Elsztain (IRSA), Claudio Cesario (Asociación de Bancos Argentinos) y Luis Galli (Newsan). Funes de Rioja fue uno de los pocos que habló al terminar el acto. Dijo a la prensa acreditada que “la situación es compleja, pero hay que resolverla. Estamos convencidos que hay oportunidades, pero que hay que aprovecharlas a tiempo. Es muy importante traer tranquilidad macroeconómica y dar previsibilidad para que pueda haber inversión. No queremos que la industria se pare”, expresó.
Al final del acto, Batakis hizo una declaración en el Patio de las Palmeras, en la que el equipo de comunicación a cargo de Gabriela Cerruti no permitió hacerle preguntas a los periodistas que desarrollan su actividad en la sede del Ejecutivo, sin embargo más tarde fue a un canal oficialista par otorgar una entrevista complaciente.
Batakis señaló que confirma que se mantendrá el rumbo económico del Presidente y aseguró que se buscará el equilibrio fiscal, y agregó que se buscará «revalorizar nuestra moneda, generar más puestos de trabajo en todo el país y tener una mirada federal, que incluya a todos y todas las argentinas».
«Creo en el equilibrio fiscal y tenemos que apuntar a la liberación de todas las fuerzas productivas del país», apuntó la ministra, «además de generar más exportaciones, uno de los aspectos clave para acumular los dólares necesarios para el funcionamiento de la economía».
No hizo referencias a la continuidad del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, una de las más preocupa a los mercados, y aseguró que se buscará propiciar la solvencia del estado argentino, bajo la idea de garantizar el financiamiento necesario, junto a la continuidad del programa económico.
Juan Pablo Peralta, periodista acreditado en Casa Rosada y el Parlamento nacional argentino para FM Concierto 105.5