Antes de anunciar medidas para paliar la pobreza y viajar a Europa, Fernández celebró inmunización de un sector de la población
El presidente, Alberto Fernández, participó por Zoom de un acto en un centro de vacunación en la localidad bonaerense de Pilar, lugar al que iba a asistir de manera presencial pero que explicó, no pudo ser porque le llevó toda la mañana trabajar en un proyecto de ley que su administración enviará al parlamento para evitar temas judiciales a la hora de tomar medidas restrictivas en el transcurso de la pandemia.
En ese contexto y frente al intendente local, Federico de Achaval con otros funcionarios, el jefe de Estado aseguró que desde que comenzaron a fabricarse las vacunas, lo único que le preocupaba al Gobierno nacional y al de la provincia de Buenos Aires era «ir en búsqueda de esas vacunas primeros, para tranquilidad de los argentinos y argentinas».
Antes de iniciar un viaje a Europa este fin de semana y anunciar una serie de baterías económicas en el Museo del Bicentenario para paliar las necesidades básicas de los 19 millones de pobres que tiene el país, en el marco del Consejo Federal Argentina contra el Hambre, el mandatario ratificó el valor de la vacuna como «bien global”, que no dependa de «privilegios a la hora de conseguirlas y distribuirlas» y sostuvo que a los sectores más empobrecidos del mundo les tiene que llegar más fácilmente porque son los que en peores están».
Además aseguró que la gestión central hace «un enorme esfuerzo para conseguir las vacunas» al tiempo que asumió las enormes dificultades que enfrentan algunos países, como la Argentina, para obtenerlas y cuestionó a los que desde adentro del país tratan de influir para que los argentinos y argentinas no se vacunen.
El titular del Ejecutivo anunció también que «a las 2 de la madrugada de este sábado parte un vuelo a Rusia» para traer más vacunas. Adelantó que llegarán más de Covax en los próximos días y que se está trabajando «para conseguir más frecuencia» en la llegada de dosis que «permita seguir con este proceso vacunatorio».
Fernández recordó los cuestionamientos de la oposición: «No nos preocupaba qué laboratorio era, la ideología del Gobierno que gobernaba, sino ir en busca de esas vacunas que iban a llevar alivio y tranquilidad a los argentinos. Acá se escribe mucho, se habla mucho de negociaciones perimidas que nunca perimieron: siguen hasta el día de hoy tratando de encontrar alguna solución para que esas vacunas lleguen. Pero en un momento dijimos: `Vamos a dedicarnos a buscar las vacunas y no a responder´», añadió.
También destacó la iniciativa para que se liberen las patentes de las vacunas contra el Coronavirus y rememoró que planteó el tema «casi en soledad» en el G20, ocasión en la que recibió el «apoyo» de Francia y México. Asimismo, ratificó su «criterio humanitario» para reclamar que las vacunas lleguen a todos los países, incluidos aquellos que sufren «bloqueos por razones políticos por parte de grandes potencias».
«La vacuna es un bien global y tienen que socializarse los avances científicos y tecnológicos», insistió. Por último, el jefe de la Casa Rosada pidió a los argentinos «no acostumbrarse a vivir con 300 a 400 muertes diarias» por coronavirus, reconoció lo «incordiosa» que se hace la vida con las medidas para evitar la propagación de la enfermedad y dejó en claro que «la mayor obligación son los últimos», que son los más afectados por las consecuencias de la pandemia.
Juan Pablo Peralta, periodista acreditado permanente en Casa Rosada y el Parlamento nacional argentino para FM Concierto 105.5