Francos aseguró que viene «un período de activación de la economía» y «meses beneficiosos».
“El diagnóstico que hicimos fue que no queríamos seguir generando más incertidumbre para poder avanzar”, explicó uno de los máximos asesores presidenciales con respecto a la decisión que se tomó en la mesa chica de Javier Milei para pedirle la renuncia a Nicolás Posse, poco antes de que el primer mandatario se subiera al ARG-01 para volver por quinta vez a los EE.UU. junto a su hermana y el ministro de Economía, Luis Caputo.
Los primeros encontronazos entre el ex compañero de Aeropuertos Argentina 2000 y el actual titular del Ejecutivo se iniciaron con la firma del ex ministro coordinador que aprobó la suba de sueldos de la plana mayor de Casa Rosada, que el presidente decidió retrotraer. Más tarde llegaron las desavenencias con respecto a la falta de nombramientos, que para los popes libertarios perjudicaron la gestión.
Eso, más el ostracismo del ex jefe de Gabinete y las sospechas que recayeron sobre él con respecto a llevar adelante operaciones (y un esquema de inteligencia) sobre los hermanos Milei –y otros integrantes del Gobierno- resultaron determinantes a la hora de acelerar su salida. Sobre esto último, que también produjo la desvinculación del interventor de la AFI (ex SIDE) Silvestre Sívori, su reemplazante en el cargo, Guillermo Francos, dijo en conferencia de prensa: “Yo no me guío por versiones”.
Otro alto colaborador gubernamental contó que “el presidente dijo que necesitamos un cambio, Posse centralizó muchas competencias, entre ellas las empresas públicas, que tendrán sectores que van a avanzar con su privatización y liquidación. Esas áreas estaban todas en JGM y se irán distribuyendo en cada uno de los ministerios con sus nuevas estructuras. Ocho secretarías de Estado estaban en control de la Jefatura de Gabinete y se van a descentralizar”, sentenció el joven consultor que camina todos los despachos de Balcarce 50.
Cuando se empezó a hablar de desafectar al ex CEO de Eduardo Eurnekián, ya se hablaba de sostener en el cargo a su segundo, José Rolandi, a quien el primer círculo del poder libertario tiene en estima porque ha participado más que su superior en las negociaciones con los opositores dialoguistas y gobernadores a la hora de intentar avanzar con las reformas en el Congreso. “Hizo un gran trabajo en la media sanción de las leyes en Diputados”, aportó un vocero informal.
Desde el principio se minimizó que fuera la primera vez que el ministerio de Interior se reduzca a una secretaría, en este caso a cargo del vice de Francos, nos referimos a Lisandro Catalán. “Somos disruptivos en varias cosas”, arguyó un funcionario de la Libertad Avanza que fue protagonista en la toma de decisiones en las últimas horas.
Entre los argumentos que se esbozaron en Casa de Gobierno en referencia a la definición que tomó el presidente, se afirmó que “Milei no tiene ningún problema en delegar, el primero que lo hizo y le salió muy bien fue Menem”, relató otro de los hombres de confianza de la secretaría General de la Presidencia, que añadió que el líder libertario «aboga por la delegación de funciones. Esa visión no la interpretó Posse”, remató.
Ante la comparación que se le hizo con los ministros que rodeaban al riojano, respondió: “Carlos tuvo funcionarios muy compenetrados y eficientes a mitad de mandato, nosotros recién vamos por los seis meses”, y agregó que su jefe “también tiene hombres muy competentes”. Esto lo remarcó cuando expresó que “quizás Jefatura no entendió las necesidades y requerimientos del Ejecutivo”.
“Esto que estamos haciendo hoy no es relanzar nuestro gobierno, es una nueva impronta de la Jefatura de Gabinete”, refrendó uno de los funcionarios que es nexo entre varias carteras, que a su vez aseveró que “en cuanto a los conceptos, éxito o fracaso de la gestión, tenemos una forma de ver, que es muy diversa a los políticos actuales, sino fíjense el día después de la mega marcha por las universidades. El círculo rojo pensó que para el gobierno venía un momento difícil y no pasó nada, el mundo siguió girando”, infirió.
En ese contexto, se adelantó que “hay muchas vacantes que completar y también que eliminar unos 80 organismos”. En la rueda periodística en Rosada, Francos declaró que “no puedo decir que mi cargo esté supeditado (a la aprobación) de la Ley Bases”. A El Litoral le contestó, consultado sobre qué correlato tendrá su designación en materia económica, que «es la primera vez que hay un presidente ministro de Economía, que está consustanciado con el titular de Hacienda (Luis Caputo)”.
El flamante jefe de los ministros sumó que «todos entendemos que lo primero a ordenar es la macro, ya está comenzando un período de activación de la economía. Todo el mundo sabía que ese reordenamiento iba a traer algo como lo que vivimos, pero estamos convencidos de que los próximos meses serán beneficiosos. Esperamos que el esfuerzo se refleje en los números de inflación», cerró.
Consulta al flamante jefe de Gabinete, Guillermo Francos, de nuestro acreditado permanente en Casa Rosada:
Juan Pablo Peralta, periodista acreditado permanente en Casa Rosada y el Parlamento de la República Argentina para FM Concierto 105.5