Investigan a seis gendarmes y allanan sedes de esa fuerza, de la AFIP y de varios municipios del norte salteño
Un nuevo y escandaloso hecho explotó en el norte de Salta. Otra vez el prestigio de una fuerza de seguridad como lo es la Gendarmería Nacional Argentina (GNA) quedó vapuleado frente al sospechoso accionar de al menos seis de sus integrantes, entre ellos un subalférez, y tres civiles.
Una investigación que hace un tiempo considerable se viene llevando a cabo en el seno mismo de la GN, al parecer comenzó a desentrañar actividades ilegales de los miembros de esa fuerza. Luego de colectar los elementos de prueba suficientes y tras recibir la aprobación correspondiente de la Fiscalía y el Juzgado intervinientes, se llevó a cabo un megaoperativo.
Dieciocho allanamientos se libraron en forma simultánea el viernes pasado, en Salvador Mazza, Tartagal, Senda Hachada y la localidad de Aguaray. Fueron los mismos gendarmes quienes irrumpieron y formaron parte del procedimiento que tiene bajo la lupa a sus compañeros y otras tres personas.
Las fuentes consultadas señalaron que entre los domicilios allanados estuvieron los escuadrones de las localidades mencionadas, además de Rentas municipal y provincial y una de las oficinas de AFIP en el norte. Actuaron gendarmes de Salta capital, Orán, Tartagal, Aguaray y Tucumán, entre otras áreas investigativas de esa fuerza.
Secuestraron 4.500 dólares (casi cuatro millones de pesos), más de 3 millones 800 mil pesos, cerca de 100 teléfonos celulares, varias notebooks, una tablet y siete pendrives, además de documentos de interés para la causa federal, como libros de registros, libretas y recibos, entre otros.
Hay nueve personas vinculadas con el hecho, seis gendarmes y tres civiles. Hasta ser sorprendidos por los uniformados, estos últimos cumplían funciones de transportistas y comisionistas. Los gendarmes quedaron en libertad, supeditados a la causa, y los civiles fueron detenidos, todos puestos a disposición de la Justicia Federal.
Están sospechados de cobrar coimas para que camiones cargados con grano pudieran pasar por caminos no habilitados en el norte salteño, sin pagar impuestos. No es la primera vez que personal de la Gendarmería está sospechado por este tipo de delitos, detrás de los seis gendarmes podría haber toda una organización dedicada al pago de coimas y dádivas.
En la zona de Pocitos son varios los pasos no habilitados, como El Chorro, El Aybal, hacia la zona de la triple frontera, también por el Chaco salteño, está el paso Hito 15, el de Martín Crosa, entre otros.
Cada vez se suman más pasos ilegales por donde circulan camiones con grano, se trata de zonas de cosecha de trigo, soja, porotos, y a raíz del accionar espurio de algunos funcionarios, quienes tienen el deber de cuidar las fronteras argentinas, es que pasan de manera ilegal los enormes vehículos hacia Bolivia.
Los gendarmes bajo sospecha son un subalférez, un cabo primero, un sargento y tres cabos. Los funcionarios pertenecen a los escuadrones de Salvador Mazza, Aguaray y Tartagal. En tanto que los civiles fueron identificados por las fuentes con las iniciales C.M.T., C.F.B. y E.A.G.