En las últimas horas escalaron los conflictos diplomáticos entre el Gobierno de Javier Milei con los de Venezuela y Colombia, algo que ocurre luego de una serie de entredichos que desembocaron en definiciones sobre la sede diplomática local en Caracas, así como la representación colombiana en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
En las vísperas del cierre de listas para las elecciones presidenciales en tierras bolivarianas, y en el contexto de un conflictivo vínculo bilateral entre Nicolás Maduro y el líder libertario que se ha potenciado, seis dirigentes opositores al régimen chavista, vinculados con la frustrada candidata María Corina Machado, pidieron asilo diplomático en la sede caraqueña de la embajada argentina.
La oficina de prensa del Presidente Milei emitió un comunicado en el que confirmó la presencia de los dirigentes opositores. “Con el respaldo de la inviolabilidad consagrada en el artículo 22 de la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas, de la cual Argentina y Venezuela son signatarias, ha acogido a líderes políticos de la oposición en la residencia oficial de la embajada argentina en Caracas”, dice el texto en su párrafo más destacado.
En el marco de esta situación regional, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, decidió retirar a su embajador en la capital porteña, debido a una serie de dichos de parte del mandatario argentino hacia él, en los que afirmó: «Mucho no se puede esperar de alguien que era un asesino terrorista». Al mismo tiempo ese país expulsaría a nuestro embajador de su territorio. El otro aludido en el mismo reportaje televisivo fue el jefe de Estado mexicano, Andrés Manuel López Obrador, al que llamó «ignorante» en respuesta a las calificaciones que el azteca hizo sobre su figura. AMLO, sin mediar tintas, lo había tildado de «nazi».
La respuesta del mexicano no se hizo esperar y a través de X escribió: «Milei afirmó que soy un “ignorante” porque le llamé “facho conservador”. Está en lo cierto: todavía no comprendo cómo los argentinos, siendo tan inteligentes, votaron por alguien que no está exacto, que desprecia al pueblo y que se atrevió a acusar a su paisano Francisco de ser “comunista” y “representante del Maligno en la tierra”, cuando se trata del Papa más cristiano y defensor de los pobres que yo haya conocido o tenido noticia».
Veremos cómo sigue la situación entre los máximos funcionarios de estas naciones que en otros tiempos tuvieron excelentes vínculos diplomáticos. Los de los pueblos perduran porque no siempre van en línea con las manifestaciones de sus líderes. Argentinos, venezolanos, colombianos y mexicanos son países integrados en muchos aspectos y esa es una postura que perdura más allá de las diferencias entre las gestiones gubernamentales que con sus ideologías presentan diversos escenarios según los tiempos que corran.
Juan Pablo Peralta, periodista acreditado permanente en Casa Rosada y el Parlamento de la República Argentina para FM Concierto 105.5
